En esta sustancia tres anillos forman la isoaloxacina y el ribitol es la cadena de 5 carbonos en la parte superior
Lo que inicialmente se conoció como vitamina B2, fue una mezcla de factores promotores del desarrollo, uno de los cuales resultó ser un pigmento amarillo que se conoce como riboflavina, la cual terminó siendo el único factor relacionado a ese nombre.
La riboflavina pertenece al grupo de pigmentos amarillos fluorescentes llamados flavinas y en 1879 se descubrió un pigmento amarillo verdoso en la leche, pero su significado biológico no se entendió hasta 1932.
En ese año la enzima amarilla de Warburg fue aislada de la levadura encontrando que esta era necesaria para activar una enzima respiratoria intracelular.
La cadena respiratoria intracelular es el proceso por medio del cual se extrae la energía de los nutrientes por medio de sucesivos pasos de OXIDACIÓN. Este proceso se lleva a cabo dentro de la mitocondria, verdadera batería celular. La vitamina B2 es un componente clave en el mantenimiento de la salud de los animales ya que es el componente principal de los cofactores FAD y FMN por lo que es requerida por todas las flavoproteínas, así como para una amplia variedad de procesos celulares.
La FAD o FLAVIN-ADENIN-DINUCLEÓTIDO y su forma oxidada que es la FADH2 está formada por una molécula de riboflavina unida a una de pirofosfato. Su función es ceder o aceptar electrones para ayudar en la cadena de oxido-reducción que permite aprovechar la energía celular.
Esta vitamina se requiere en el metabolismo de grasas, carbohidratos y proteínas.
Afortunadamente se encuentra en abundancia en alimentos como leche, vegetales verdes, arroz, carnes y otros alimentos. Es una sustancia hidrosoluble de color amarillo.
Esta vitamina es sensible a la luz solar y a ciertos tratamientos como la pasteurización, proceso que hace perder el 20% de su contenido. Por ejemplo, la exposición a la luz solar de un vaso de leche durante dos horas hace perder el 50% del contenido de vitamina B2.
Es necesaria para la integridad de la piel, las mucosas y de forma especial para la córnea, por su actividad oxigenadora, siendo imprescindible para la buena visión. Su requerimiento se incrementa en función de las calorías consumidas en la dieta: a mayor consumo calórico, mayor es la necesidad de vitamina B2. Otra de sus funciones consiste en desintoxicar el organismo de sustancias nocivas, además de participar en el metabolismo de otras vitaminas. Como se ha mencionado, sus fuentes naturales son las carnes y lácteos, cereales, levaduras y vegetales verdes.